¿Por qué X (antes twitter) es una mala herramienta de comunicación política?

¿Fiarías tu comunicación personal en internet a una plataforma administrada por un neoliberal, que está financiando a la extrema derecha de forma global?

Si la respuesta es si, entonces te recomiendo que no sigas leyendo esta entrada. De lo contrario si tu respuesta es no, te sugiero no solamente que sigas leyendo, sino que por favor hagas tu aportación. (Comentarios al final de la entrada)

Twitter nació como una plataforma de microbloggin, donde con 140 caracteres tenías que expresar tu comunicación. Su puesta en funcionamiento por el año 2006 supuso un antes y un después en la búsqueda de fuentes, ya que, a través de esta plataforma, personas anónimas y personas relevantes comunicaban constantemente todo aquello que les viniera en gana. Sin intermediarios ni periodistas.

En teoría se acabaron los filtros. Entendiendo por filtros la industria periodística y de los medios de comunicación sociales. Pero eso en teoría como veremos más adelante.

Muy pronto dicha plataforma adquirió mucha notoriedad, a modo de visitas y usuarios. Como podéis ver en el siguiente gráfico:

En 13 años multiplicó por 10 su número de usuarios. Y en cierto modo este dato, puede contradecir mi argumento «…es una mala herramienta de comunicación política».

No tengan prisa. No sean ansiosos…todo llegará.

De Barak Obama a Donald Trump. Vidas gemelas en el entorno digital del microblogging

Barak Obama ha sido sin lugar a dudas el pionero en la utilización de la web 2.0 como herramienta de marketing político. Su legado, este legado, ha servido como inspiración a muchos políticos y políticas. Y por supuesto, Donald Trump no fue, ni es una excepción

En ambos casos, afrontaron el territorio virtual de la red como canal de comunicación. A sabiendas de lo que en aquel entonces se sabía, pero que nadie se atrevió a pronosticar. En el caso de Barack Obama, a través de sendas e inmensas bases de datos a través del email, para obtener fondos en su campaña, a través de microdonaciones. Lo mismo que Donald Trump realizó en su primera campaña electoral para la presidencia de los USA

A partir de ahí, gurús de la comunicación como Steve Bannon campaban a sus anchas. ¿Recuerdan el escándalo de Cambrigde Analytica en Facebook? Pues aquí tienen a uno de sus más reputados ideólogos de aquello. Aplicó la máxima de

Si es gratis, entonces el producto eres tú -Richard Sierra 1973-

Monitorizaron (y lo siguen haciendo) a gran escala los perfiles en redes sociales como facebook y twitter. Las tendencias, los likes, los temas, los retwitts de los usuarios. Se establecen todos los días grafos y tendencias políticas en estas redes sociales.

Llegaron los demócratas de nuevo a la Casa Blanca y tras los acontecimientos del asalto al congreso, Donald Trump puso a funcionar la máquina de los bulos, los fake y las noticias falsas. 3 días después, Twitter bloqueó la cuenta del entonces ex presidente de los USA.

¿Qué sucedió después? Fácil…el hombre más rico del mundo adquirió Twitter por 44.000 millones de euros y la convirtió en X. Y a partir de entonces, se establecieron nuevas normas en la moderación y curiosamente se estableció un nuevo orden en la comunicación personal en la Red. Los contenidos repletos de bulos, mentiras, fake news, orientados muy especialmente a la ultraderecha obtienen relevancia mediática y social.

En paralelo a todo esto, en España, Vox utiliza todo un entramado de bots para invadir de contenidos falsos Internet.Y utilizan todo tipo de medios, desde Facebook, X, Instagram, Whastapp. El resultado político es destacable. De ser una fuerza política marginal, sin estructura ni cuadros, a ser la tercera fuerza política en España.

Y cuando Donald Trump decide volver a presentarse a la reelección como Presidente de los USA…oh casualidad, la red social X le vuelve a restablecer su cuenta baneada. La diferencia es que pasó de tener alrededor de 5 millones de seguidores a más de 9 millones de seguidores en la actualidad.

Y además, será nuevamente el Presidente de los USA. A pesar de ser un convicto de la justicia y de dedicarse toda la campaña electoral a decir, bulos, mentiras, fake news.

Conclusiones:

¿A nadie le llama la atención la cantidad de «influencers» que hay cuyo único propósito es generar noticias falsas?

¿Influencers que plantean como algo positivo que hay que irse a paraísos fiscales para pagar menos impuestos y que pagar impuestos es malo?

¿Quien o como se financia la actividad o actividades de estos «influencers» por no llamarles ciberactivistas (con unos sueldos que te kagas)? ¿Las marcas consideran que es positivo que su comunicación política esté basada en bulos, mentiras, falsas conspiraciones, temas antivacunas, etc..etc…etc?

¿De verdad creéis que es una buena idea generar un sistema de bots en las redes sociales para amplificar el mensaje y la audiencia?

¿Quien puede garantizar en X que tu contenido pueda ser visto, si eres un ciudadano de a pié, de izquierdas o progresista? ¿Tú talento? ¿Tú frecuencia en la publicación? ¿El uso de hastags? 😁

¿Quien -de momento- amplifica los contenidos de los principales lideres políticos progresistas o de izquierdas con carácter global? ¿Algunos pocos medios de comunicación con una determinada línea editorial?

¿Elon Musk te va a decir el algoritmo de publicación de X?😆

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